Como cuidar tu material de pádel

En ocasiones nos hacemos la pregunta ¿Por qué me duran tan poco esas zapatillas? ¿Por qué he roto mi pala nueva tan pronto? ¿Por qué no botan las pelotas? Hay una explicación para cada uno de los casos. Por norma general vamos tan cegados a la pista y salimos tan eufóricos o enfadados que apenas nos damos cuenta de cuan “imprudentes” podemos llegar a ser con nuestro material deportivo.

Dentro de la pista lo principal es tener un comportamiento moderado que no nos lleve a cometer locuras con nuestros utensilios de juego: evitar impactos contra el suelo o el cristal, evitar derrapar en exceso con nuestras zapatillas o eliminar la fea costumbre de golpear el plano de nuestra pala con la palma de nuestra mano como si de una pandereta se tratara. Pero realmente los momentos más peligroso para nuestro material vienen después, desde que entramos a vestuario al finalizar un partido hasta que volvemos a pisar el terreno de juego de nuevo.

En el caso de las bolas que usemos para jugar debemos de tener en cuenta lo sensibles a la humedad que son, cuando el pelillo de la bola se empapa la hace pesada y casi inservible. Es por ello que te aconsejamos que nunca mezcles tu toalla mojada o tu ropa húmeda en el mismo departamento del paletero,  en el que lleves tus pelotas de pádel. Lo mejor que podemos hacer es mantenerlas siempre dentro de su bote original y guardarlas en un compartimento distinto al de la ropa en nuestro paletero.

Para nuestras zapatillas de pádel aconsejamos una limpieza en el momento posterior al partido, debemos de sacar todo el sílice que se acumula en el interior de la zapatilla. Es importante no utilizar nuestras zapatillas de pádel para practicar otro deporte, el uso en otra superficie distinta puede conllevar un desgaste excesivo de tu suela. Con estas pequeñas atenciones conseguiremos alargar un poquito más la vida de nuestras zapatillas.

Y por último nuestra pala, probablemente lo que más tengamos que cuidar. Debemos de tener en cuenta que la goma pierda las propiedades con facilidad a causa de los cambios de temperatura. Al igual que la pelotas de pádel, no dejes nunca tu pala en un compartimento con humedad y sobre todo, no se te ocurra dejarla en el maletero del coche, las altas temperaturas que pueden alcanzar afectarán de forma muy negativa a las prestaciones de tu pala.

Así que, intenta olvidar el resultado de la contienda una vez abandonada la pista y céntrate un poco más en el cuidado de tus armas padeleras. De todos modos, si no consigues cuidar tus productos lo suficiente, en www.newpadel.es estaremos encantados de atenderte y ofrecerte toda una serie de productos relacionados con el padel.