Un partido de pádel inicia con el saque, el primer golpe durante la batalla. El saque en el pádel es el inicio de la estrategia y por eso es tan importante como el resto de los golpes. El saque se debe de practicar de manera regular hasta desarrollar una técnica eficiente que pueda desequilibrar al rival. A continuación, te diremos todo lo que debes de tomar en cuanto para mejorar tus saques, como la importancia de tener unas buenas pelotas de pádel.

Consejos y recomendaciones para una buena técnica de saque en pádel

El saque es un momento del partido bastante complejo, aunque pueda parecer simple. Cualquiera que sea el saque se realice, se debe de hacer con una técnica bien desarrollada y tomando en cuenta ciertos detalles. En internet, se pueden encontrar cientos de guías y vídeo-lecciones sobre los saques, ya que son muchos los jugadores interesados en dominar su saque.

Cuando el jugador saca, tiene un abanico de posibilidades para jugar. El jugador puede elegir la fuerza de su saque, así como su dirección, o si lo quiere realizar plano o cortado. Pero una de las preguntas más comunes entre los jugadores es hacia dónde debe de ir dirigida la pelota para hacer más daño. Y esa es precisamente la pregunta que contestaremos a continuación.

¿Saque al revés o a la derecha?

Seguramente sabes que el saque debe de ser cruzado, es decir, que la pelota tiene que botar en el lado opuesto del que sacas. Pero aún dentro de ese lado, puede definir si la pelota irá hacia la pared, en el medio del recuadro o hacia la “T”.

Si tu saque va más cercano hacia la pared, el rival podrá rematarla con un golpe de derecha. Este es el golpe más común en el juego, y el más sencillo de realizar. Es por eso que, los golpes que vayan dirigidos hacia la derecha del jugador, tendrán más probabilidad de ser respondidos.

Y si por el contrario, envías la pelota con dirección hacia el lado izquierdo del jugador, tendrá que responder con un golpe de revés. El golpe de revés es un golpe que puede ser letal, pero es más difícil de dominar. Sin embargo, la mayoría de los jugadores experimentados tienen bien dominado el golpe de revés.

Entonces, ¿hacia qué lado debería ir el saque? La verdad es que no hay un lado específico o que sea mejor que el otro. La clave está en no ser predecible, variar la dirección de la pelota, enviando algunos saques hacia el revés del jugador y otros hacia su derecha.

Consejos esenciales para mejorar el saque en el pádel

• Impactar la pelota a la altura de la cintura: siempre se tiene que impactar la pelota a la altura máxima permitida. De esta forma se tiene un mejor ángulo para que la pelota pueda llevar potencia y no estrellarse contra la red.
• Golpear la pelota con fuerza: la potencia es fundamental en el saque. Un saque potente pondrá en problemas al rival, y la probabilidad de que pueda rematar será menor.
• Dominar el rebote de la pelota: rebotar la pelota antes de golpearla en el saque, es una acción que se tiene que practicar. Es importante dominar la fuerza con la que la pelota rebota, para saber si solo es necesario dejarla caer o se tiene que aplicar fuerza para rebotarla.
• Saque cortado o plano: el saque puede ser plano o cortado. Si apenas comienzas a jugar, lo primero es aprender a sacar con golpes planos. Posteriormente, es recomendable comenzar a cortarlos. Este tipo de golpes son más letales porque la pelota resbalada con el suelo. Esto hace que sea más difícil rematarla.
• Utilizar el peso del cuerpo para golpear la pelota: también es importante entender que la fuerza no proviene solo del brazo, sino de todo el cuerpo. Es por eso que para sacar, el cuerpo debe rotar, para poder aplicar más potencia al saque.
• Posición del cuerpo: la posición también es muy importante. El jugador se debe de plantar de lado para poder efectuar la rotación.
• Variar la dirección del saque: como ya hemos mencionado, el saque no puede ser predecible, se tiene que variar su dirección. Lo más recomendable es mandar algunos saques a la derecha y otros al revés, así como varias la potencia y el efecto. De esta forma, evitamos que el rival pueda leer nuestros movimientos.